Images Miguel 'Serolo'

Se escribe Miguel Zerolo pero aquí en Canarias se pronuncia Miguel Serolo con s de senador, cargo que no debió aceptar pero, sobre todo, cargo para el que no debió proponerle su partido y elección que no debió refrendar el Parlamento de Canarias. Aquella votación es un buen ejemplo de las cloacas de la política. Había que nombrar a tres representantes de Canarias para la Cámara Alta. Del pacto no escrito entre los partidos mayoritarios se benefició, concretamente, Serolo con s de suerte, la que siempre le toca. La votación la ganaron los intereses, esos que en teoría hay que dejar a un lado cuando se trata del bien común.

Se escribe Zerolo y se pronuncia Serolo con s de sentencia, la que le condena por un delito continuado de prevaricación administrativa, es decir, dictar resoluciones a sabiendas de que son ilegales. Las críticas al expolítico no son personales sino estrictamente relacionadas con sus funciones públicas. Precisamente este es el primer reproche: toda su vida se ha limitado a funciones públicas. Quienes le quitan hierro a la situación del exalcalde dicen que ha dimitido tras 21 años en CC. Para ser exactos hay que recordar que antes fue concejal, primero con la UCD y después con ATI. Con este juego de oca a oca y tiro porque me toca es difícil de creer la parte altruista de sus servicios en política. Se llama Zerolo y se pronuncia Serolo con s de sumar, en total, 35 años en cargos públicos de los 57 que tiene. No tengo ninguna duda de que habrá hecho cosas buenas pero Miguel Zerolo representa, en resumen, la política como bicoca.
          Es realmente llamativa la lealtad que, a día de hoy, le siguen profesando importantes políticos y periodistas a pesar de la primera condena y las imputaciones que acumula. Queda Zerolo para rato hasta que la justicia llegue a su zenit que se puede escribir tanto con z como con c de zarandajo o caballero.